Sí, así es. Un magnífico juego familiar sobre caminos y ciudades. Y nunca mejor dicho. Ahora mismo sabréis por qué.
El objetivo es sencillo: Expandir un imperio a base de poblados y ciudades hasta lograr una serie puntos que te permita imponerte a los demás jugadores.
Las reglas: Conseguir recursos, de acuerdo con la puntuación obtenida en los dados, con los que poder comprar caminos y ciudades para no dejar de crecer.
Para ello, se colocan dos poblados iniciales que servirán para obtener las primeras materia primas. En el desierto, lejos de la civilización se esconde el ladrón, que hará su aparición cada vez que los dados sumen siete.
Los sucesivos poblados se irán construyendo, de acuerdo con los costes indicados, cada dos encrucijadas; y sobre ellos se levantarán las futuras ciudades.Además pueden comprarse cartas de desarrollo, que darán un impulso vital al juego.
El resultado: Un par de horas de diversión y nervios para toda la familia.
El juego, cuya primera versión fue Los colonos de Catán, cuenta ya con más de 7 expansiones -sólo tres de ellas comercializadas en España-; entre las que se encuentran: Los navegantes de Catán, Ciudades y Caballeros de Catán; y Mercaderes y Bárbaros.
Asimismo, el juego cuenta con una ampliación para el tablero básico de cuatro a seis jugadores. En otros mercados pueden encontrarse una versión para niños o la expansión Atlantis.
Y por si esto fuera poco, existen sagas completas en forma de historias como las de Roma, Alejandro Magno, Troya y América; además de aventuras propias como las de Candamir o Elasund.
Los colonos de Catán fue creado por el alemán Klaus Tueber, fascinado como estaba por los antiguos descubrimientos y las historias de aventuras. La idea original de crear un mapa sobre el que construir y del que obtener recursos madereros, agrícolas y demás, quedó perfectamente plasmada en sus célebres hexágonos.Tal es el éxito de este juego, que investigadores de la Universidad de Queen ya han iniciado una serie de investigaciones relacionadas con el futuro de los juegos. El juego cuenta, aimismo, con una versión online para los amantes de los juegos en red.
En fin, os recomiendo que os apuntéis a la "colonomanía" y comencéis a disfrutar cuanto antes de estos magníficos juegos de mesa que harán las delicias de familiares y amigos. ¡Ánimo y suerte en la creación de vuestros imperios!
